Colectivos no Respetan Límite de Capacidad 

CHOLULA.- Se escucha por ahí que en varios templos donde se venera a la virgen de Guadalupe, los Mayordomos, pudieron dejar desapercibida la fecha, y a muy temprana hora, con muy reducido grupo de devotos, y a puerta cerrada le cantaron las mañanitas. No se tuvo misa, pero si rosario que rezaban los ahí presentes, con un gran fe y devoción, casi todos coincidieron en pedir su amparo para poder lograr superar la pandemia. Los cohetes no podían faltar. ¿Será? Se escucha por ahí que cada domingo, a las puertas de los templos, en los atrios, se ven las largas filas de quienes acuden a escuchar misa, en todos se mantienen las medidas sanitarias vigentes, el cupo limitado, ingresar con cubre-boca que deben de mantener puesto de manera correcta durante toda la homilía, aplicarse el gel antibacterial y usar solo los asientos libres. Llama la atención que cuando salen, se ven los grupos de familiares o conocidos, quienes al retirarse, se olvidan de la sana distancia, como suele verse en las calles, incluso algunos se bajan el cubre-boca, al llegar a la calle, se lo vuelven a poner. Son más cada día quienes lo usan. ¿Será? Se escucha por ahí que los hospitales donde atienden a enfermos por covid-19, están saturados, los familiares tienen que andar buscando a donde les reciben a su enfermo, sin importar la distancia que debían de recorrer, para que se los reciban. Se va creando una mayor conciencia, que no es un juego, y aunque existen aún quienes no acatan las medidas, son más los que actúan con responsabilidad. ¿Será? Se escucha por ahí que en donde se ve, en determinadas horas del día, que no acatan el cupo de pasajeros, con choferes del transporte colectivo, sobre todo de las combis. El pretexto es que ellos deben de seguir cumpliendo con la cuota que les pone el patrón, además de lo suyo. También el no usar el cubre-boca. ¿Será? Se escucha por ahí que también muchos de los choferes del transporte colectivo, por costumbre o estrés, están haciendo caso omiso al 1X1, llevan prisa y se pasan sin precaución en las esquinas. Quienes más sufren con estas actitudes, son los peatones, quienes solo se limitan a ver pasar a esas unidades, y esperar que algún particular les ceda el paso. ¿Será? Se escucha por ahí que las autoridades estatales y municipales, y las eclesiásticas, materialmente están bombardeando con información para evitar las reuniones, como posadas, fiestas navideñas. Invitan a pasarlas en casa, solo los que ahí viven, no llevar invitados. Por otra parte, en los templos, han venido organizando, algunos eventos, dicen serán controlados, con el mínimo de personas. Por ejemplo en Mixquitla, han estado realizando procesiones con la imagen del Niño Dios. Casi en todos los templos, tendrán actividad la noche del 24. Ojala y por lo menos acaten las medidas sanitarias, por el bien de todos. ¿Será? Se escucha por ahí que en la recta a Puebla, son más los automovilistas quienes circulan a poco más de 100 kilómetros por hora, pese a que el límite son 80 kilómetros por hora. Además de que no faltan los “acelerados” quienes usan el supuesto acotamiento, para ir rebasando. Ya muchos piden que se aplique de nueva cuenta la multa mediante radar. Es lamentable que si no hay sanciones, no se respeten los límites velocidad. Esa situación ha generado ya varios accidentes, e incidentes, ya que esos conductores acelerados, al no poder pasar tan rápido como quisieran, se lanzan contra quienes sí respetan. ¿Será? Se escucha por ahí que quienes se dedican a la venta de piñatas, esperan bajas ventas. En años pasados, ya se tenían a la venta, hoy de plano muchos de esos vendedores, decidieron no invertir en este tradicional elemento de las posadas, considerando que no tendrán clientes, primero por las restricciones implementadas por el gobierno, y segundo porque la economía no permite hacer gastos. ¿Será? Se escucha por ahí que en el parque de la ciudad, colocaron algunos puestos de temporada, con la advertencia de que si no respetan las medidas sanitarias, los habrán de clausurar. Eso no depende tanto del comerciante, sino de los clientes. Debe de ir uno por familia, evitando así las aglomeraciones y ayudar a esos comerciantes, quienes igual que todos sufren los efectos colaterales del covid-19. Abuuuuuuuuuuuuuuurrrrrrrrrr.