Editorial

 

Por Mario SALAMANCA RODRÍGUEZ

 

EL Decreto de Ciro

 

CHOLULA.- Qué dice de Ciro; es mi pastor, cumplirá todo lo que yo quiero, al decir a Jerusalén; serás edificada; y el templo, serás fundado. Isaías. 44-28. La historia secular y bíblica demuestran que el rey Ciro fue el fundador del imperio Persa, conquistó Babilonia el año 539, a. C., dando fin al imperio, neo-babilónico, instituyó gobierno justo, y de misericordia, estableció una política, de tal diplomacia, repatriando a los pueblos cautivos, permitiendo a los judíos regresar a Palestina. Ciro “El Grande”, 530 a. J. C., rey de Persia 556-530, hijo de Cambices, tomó Babilonia 539, llegó a ser dueño de toda Asia Occidental. En el primer año de Ciro rey de Persia, para que se cumpliese la palabra de Jehová en el espíritu de Ciro rey de Persia, el cual hizo pregonar la palabra y también por escrito, por todo su reino, diciendo: Así ha dicho Ciro rey de Persia; Jehová el rey de los cielos me ha dado todos los reinos de la tierra, y me ha mandado que edifique casa de Jerusalén,  que está en Judea, quien haya entre vosotros de su pueblo, eres dios con él, y suba a Jerusalén que está en Judea y edifique la casa de Jehová dios de Israel (él es dios) la cual está en Jerusalén y a todo el que haya quedado en cualquier lugar donde ore, ayúdenle los hombres de su lugar con plata, o por bienes y ganado, además de ofrendas voluntarias para la casa de dios, la cual está en Jerusalén. Esdras I al 4.

 

El regreso a Jerusalén. Entonces se levantaron los jefes de las casas paternas en Jerusalén, Benjamín, y los sacerdotes y los levitas, todos aquellos cuyo espíritu despertó dios para subir a edificar la casa de Jehová, la cual está en Jerusalén. Y todos los que estaban en sus alrededores les ayudaron con plasta, y oro, con bienes y ganado, y con cosas preciosas, además de todo lo que se ofreció voluntariamente. Y el rey Ciro sacó los utensilios de la casa de la casa de Jehová, que Nabucodonosor había sacado de Jerusalén y los había puesto en la casa de sus dioses. Los sacó, pues, Ciro rey de Persia, por tanto mando de Mitridates tesorero, el cual los dio por cuenta a Sesbasar príncipe de Judá. Y esta es la veintinueve cuchillos, treinta tazas de oro, otras cuatrocientas diez taza de plata, y otros mil utensilios, todos los utensilios de oro, y de plata eran cinco mil cuatrocientos todos los hizo llevar Sesbasar con los que subieron del cautiverio de Babilonia a Jerusalén.

 

Rociad, cielos, de arriba, y las nubes destilen la justicia, abrase la tierra, y prodúzcanse la salvación y la justicia, háganse brotar juntamente, yo Jehová lo he creado. 1. Ay del que pleitea con su hacedor. ¡El tiesto con los tiestos de la tierra! ¿Dirá el barro al que lo labra? ¿Qué haces?, o tu obra no tiene manos, ¡Hay del que dice al padre: ¿Por qué engendraste?, y la mujer ¿Por qué diste a luz? Así dice Jehová, el santo de Israel a su formador; preguntadme de las cosas por venir; mandadme acerca de mis hijos, y acerca de la obra de mis manos. Yo hice la tierra, y creé sobre ella al hombre, yo, mis manos, extendieron los cielos y a todo su ejército mandé. Yo lo desperté en justicia, y enderezaré todos sus caminos; él edificará mi ciudad, y soltará mis cautivos no por precio ni por dones, dice Jehová de los ejércitos. Así dice Jehová; El trabajo de Egipto, las mercaderías de Etiopia, y los sabemos, hombres de elevada estatura, se pasarán por grillos, te harán reverencia y te suplicarán diciendo: Ciertamente a ti en ti está dios, y no hay otro fuera de dios. Verdaderamente tú eres dios que te encubres, dios de Israel, que salvas, confusos y avergonzados serán todos ellos; irán con afrenta todos los fabricadores de imágenes. Israel será salvo en Jehová con salvación eterna, no os avergonzaréis ni os afretéis, por todos los siglos.