Hándicap Político

Analista Político

Carta a un presidente.

Renglones en las líneas de la cárcel

Primera parte

SAN ANDRÉS.- Han pasado casi un año, luego de la muerte de su padre, todos lo sentimos, algunos más, otros menos. Para quienes no tienen corazón bajo el pretexto de  nadie por encima de la ley no tuvieron el menor recato, menos en un lecho de muerte.

Siempre existirá una justicia divina, mientras el diablo goza el dolor de muchos como Jesús en la cruz pero, no todo es eterno, en este mundo terrenal se acaban los días y los años y con ello también las prebendas y apoyos de un sistema gubernamental estatal a modo de otros.

Corrupción denunciada, pero no será el karma, será la propia historia quien señale a los culpables.

Hoy todos lo saben, un presidente traicionado por sus propios abogados del diablo que esperan tener obra pública y espacio en la presente administración.

Los palacios de mezquindad en los estrados de la defensa para alargar el proceso  que solo marca una proceso a modo y con tintes político para tapar el fraude del 18 y la muerte de dos.

Mientras existan los verdaderos traidores de sanandreseños, en las filas de morenistas y de comparsas de guerrero, varios entreguistas panistas serán señalados antes de que cante un gallo. La soga está en su lugar, alguien la tomará y otra estará lista para ser utilizada antes de que llegue el 24, la población ha evolucionado como los intereses de grupos en favor de la verdadera libertad, el progreso y la transformación.

Al tiempo serán, investigadas todas y cada una de esas obras magistrales llenas de corrupción, diezmos y raterías, hoy comienzan a caerse obras, aquellos hipócritas de la mentira, se han terminado lo que les dieron debajo de la mesa, de cargos religiosos que solo buscan espacios para beneficiarse a  costa de la fe y de instituciones religiosas.

Todo en este tiempo se sabe, a través de las paredes de la cárcel, la justicia terrenal ante la divina comienza a acelerar el proceso de desempolvar expedientes en  las mesas de delitos electorales atraídos a asesinatos  donde el poder político y cargos de gobernanza fueron beneficiados.

Todos lo saben, incluyendo a funcionarios de alto nivel que están esperando el tropiezo y caída de un gobernante que la enfermedad diezma su ambición y agota el tiempo de poder.

Los tiempos de Dios  son perfectos dicen unos.

¿Qué Dios?

Si sus almas  destilan odio, lujuria y venganza, seguramente será el de las tiniebla. Eso lo dicen  algunos cercanos, así lo sostienen sus actos, sus dichos y sus acciones.

El caído, lo sabe, el benevolente esperara el juicio se un verdugo, juez y parte, que sabe que no podrá probar más que unos cargos menores en su contra, nada que no pudiera resolverse en el diálogo y en subsanar errores.

Eso lo saben, eso lo dicen y eso lo escriben. Falta poco para que los grandes traidores, dejen sus espacios laborales y sus cargos que no han sabido tomar medidas y acciones para  su futuro y sus proyectos.

En todo momento los verdaderos amigos, estuvieron en las puertas de la cárcel en San Pedro Cholula, en San Miguel, pronto se manifestaran recordando que los amigos no se olvidan, menos quienes brindaron la mano, la amistad y la lealtad.

Ese es el poder que tiene el señor presidente, ese es el miedo que le tienen y su silencio desde los barrotes de la cárcel, no le han debilitado, le  han fortalecido, para su retorno que comienza a inquietar a, más de unos.

La sombra en semana Santa, mengua y el poder divino, se impone poco a poco a los cambios que están en puerta.

Continuará.