Los héroes abandonados

Los héroes abandonados

Por: Dr. Omar Josué ROJAS VÁZQUEZ

CHOLULA.- Poco o nada sirven los reconocimientos, las esculturas, las pinturas y las palabras cuando los actos no concuerdan con el mensaje, el oro de las estatuas pasa a ser simple hojalata, los discursos llenos de elogios y lisonjas desbordadas se convierten en algo más que mentiras, el papel donde se reconoce la labor del personal de salud como héroes queda convertido en desperdicio.

Es increíble que a finales de marzo de 2021, con más de 200 mil muertos y con la tercera ola en puerta, gracias a la ignorancia, necedad y estupidez de la gente, los médicos del sector privado no se hayan vacunado, parece que vacunar a cuentagotas es la línea a seguir, que es preferible echar a perder la vacuna antes de que a alguien más se le aplique, es vergonzoso el actuar de quienes se supone sirven a esta nación, pues más que siervos, son dóciles sirvientes que llevan una ideología basada en el rencor hasta las últimas consecuencias.

Los médicos siguen muriendo, al igual que enfermeras, personal de básicos, inhaloterapeutas y demás miembros del personal de salud, la tercera ola, que será resultado de todas las salidas de semana santa, será el último clavo en el ataúd del personal de salud, desde los médicos en las unidades covid, hasta los médicos de primer nivel en consultorios anexos a farmacias, todos ellos son la famosa primera línea, el término de segunda o tercera línea, es una clasificación equívoca, como médico de farmacia puede uno atender a cualquier cantidad de casos sospechosos, inclusive más que un intensivista en un covitario, sin embargo, el honorable senado de la república prefiere no modificar la campaña de vacunación, y dejar a los médicos del sector privado (todos, desde aquellos que trabajan por consultas gratuitas o de 30 pesos, hasta a aquellos que trabajan en grandes hospitales privados) sin la posibilidad de vacunarse antes de su fecha estimada por edad.

México sigue siendo el país con menor número de médicos vacunados y con mayor número de médicos muertos en esta pandemia, es muy placentero saber que nuestros abuelos y adultos mayores ya están siendo vacunados, pero sería mucho más placentero saber que para aquellos que estamos expuestos, existe una oportunidad de ser vacunados antes de volver a contagiarnos.