“Deliciosos Instantes”
Por: Sandra Liliana MARTÍNEZ ZANELLA
ARKANSAS, USA.- Mientras haces una pausa en tu vida, disfrutas de un delicioso café, meditas sobre las circunstancias que estás viviendo, observas caer las hojas de los árboles, sonríes con las ardillas que se corretean mutuamente. ¿Qué piensas en este momento? ¿Qué te hizo llegar aquí? Sientes una tranquilidad tan extrema, una paz en el corazón que invita a acompañarte en una tarde de amor, escuchando la música de violines, saboreando una conchita con café de sabor italiano, mexicano, colombiano, el que gustes pero que te de ese sabor de “Gloria”.
Este otoño ya se alcanza a ver las hojas que cambian de color, que empiezan a caer, ese viento frío que sientes en la brisa cuando sales a la terraza. Los días pasan tan rápido que ya estamos tan cerca de ver los campos en México con la flor de cempasúchil, los aromas del pan de muertos, los inciensos y todas las costumbres que tienen de hacer ofrendas en nuestro querido país mexicano.
Todos los días necesitamos una dosis de optimismo, un café para comenzar y otro para continuar…El otoño lleva puesto consigo el color de ojos que me hace recordar la miradas de mi familia, tonos cafés que me hacen sentir tranquila, feliz de que siempre podré contar con ellos, sin importar la distancia que hay entre nosotros, entre dos países ellos siempre están conmigo.
El amor que puede ser eterno y puede ser fugaz. –Pablo Neruda
Enamórate de los deliciosos instantes con alguien especial, nunca se vuelven a vivir pero quedan en la memoria de un buen café en un otoño frío que se lleva consigo todo lo que algún día existió para dar entrada a un nuevo ciclo que te traerá nuevas energías, nuevas vibras, nuevas amistades y sobre todo un nuevo amor que realmente será fiel hasta tus últimos días de vida, ese es el amor del bueno.
Mientras terminas tu café y conchita del sabor que elijas, no olvides respirar profundamente para llevarte contigo el aroma tan deliciosa del café que está enfrente de ti, cuando te lo termines hasta ahí quedo ese momento, hasta que te vuelvas a tomar otro café.
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