Tradiciones Modificadas por Covid-19 

CHOLULA.- Se escucha por ahí que esto de la pandemia ha ido modificando en gran parte la vida cotidiana de todos los mexicanos, y los cholultecas no han sido la excepción, y se ve en cada evento tradicional, como fue la feria, el trueque, ahora las procesiones de la virgen de los Remedios, en el cambio de las Circulares. Se tiene que el pasado domingo, en lugar de ser llevadas en hombros las imágenes, se hizo en un gran camión, evitando así las aglomeraciones de los devotos. En lugar de claverías, una descubierta de motociclistas, todos hijos del barrio o avecindados del mismo. La fe predominó en todos, y la sorpresa de quienes los vieron pasar por las calles de la ciudad, rumbo al templo de Señor Santiago, en el barrio de Mixquitla, se notaba a simple vista. ¿Será? Se escucha por ahí que en meses próximos se tendrán los cambios de las otras 2 Circulares, San Pedro de Ánimas y de la virgen de Guadalupe, y se verá si las condiciones ya lo permitirán, para regresar a lo tradicional, o se tendrán que modificar como en esta ocasión. ¿Será? Se escucha por ahí que con la reapertura del parque, el pasado domingo se vieron a decenas de familias disfrutar de este espacio, caminando, descansando en las bancas y no faltaron los que en los jardines, tuvieron su día de campo o solo recostarse en el pasto. A muchos de ellos, los invitaron a no hacer grupos numerosos, a que pasen de un lado a otro del parque, porque aún se corre el riesgo de posibles contagios de Covid-19. ¿Será? Se escucha por ahí que el pasado fin de semana, llegaron muchos visitantes a la ciudad, la mayoría de Puebla, capital, quienes por desgracia, no respetan las medidas sanitarias, hacen caso omiso de usar el cubre-boca, cuando andan en espacios públicos. Unos se sorprendían cuando un guardia ciudadano, les pedía usar el cubre-boca e incluso les daba uno, al argumentar haberlo olvidado. Pero no faltaron aquellos, ciudadanos prepotentes, que se sienten inmunes o inmorales, y se negaron a usarlo. Por ese tipo de personas, es que no se puede superar totalmente la pandemia, y el riesgo es que pueden venir contagiados, sin saberlo, y contagiar a los cholultecas. ¿Será? Se escucha por ahí que en materia de seguridad pública, la situación se va complicando, por el robo de auto partes, como llantas, o de carros estacionados en vía pública. Ahora el riesgo son los delincuentes improvisados, o los que llegan de otras partes, que aprovechan cualquier descuido, para hacer de las suyas. Si bien es cierto que la policía municipal, es la responsable de la seguridad de todos, también lo es que los ciudadanos deben de participar, más que criticando o señalando el trabajo de los uniformados, es adoptar medidas preventivas. Y debe ser desde ahora, para irse acostumbrando a esas medidas, como no dejar el carro en la calle, y si es necesario, entonces estar pendiente del mismo, no llevar mucho dinero en la cartera o en la bolsa, estar alertas cuando se camina en las calles, si alguien lo sigue, si hay un sujeto con capucha, en fin todo lo que no es normal, para entonces cruzar de un lado a otro la calle, y si siente que es seguido, avisar a la policía o a un familiar a amigo cercano. Más vale pecar de exagerado, que ser blanco de esos delincuentes, que en su mayoría están resultando venir de México, para hacer de las suyas. ¿Será? Se escucha por ahí que cada día son más, pero mucho más, quienes usan el cubre-boca, al andar en las calles o espacios públicos. Donde en ocasiones se ve que lo hacen a un lado, es en los mercados municipales. Hay comerciantes, quienes de plano, tienen el cubre-boca en el cuello o en la bolsa de su mandil. Cuando ven que se acerca algún elemento de Protección Civil, se acerca, se lo ponen. No hay que olvidar que el uso de este accesorio cotidiano, es obligatorio. Cierto que no hay sanción por no usarlo, pero si una gran recompensa, la salud de todos. Y la sana distancia, también se debe de respetar, y se ve cuando se hacen las filas en bancos, CFE, Telmex, principales lugares, y ahora hasta en negocios establecidos, la mayoría lo respeta. Es una nueva cultura de cuidarse, y entre más ciudadanos participen, será mucho mejor para todos. ¿Será? Se escucha por ahí, que se debe cuidar mucho de aquellos que llegan a pedir ayuda, inventando una dolorosa historia, hay quienes solo lo hacen para ver si ese domicilio puede ser blanco de un robo. Por desgracia pagan justos por pecados y lo recomendable, no dar nada, si se desea ayudar, es mejor tomar lo que se pretende regalar, y llevarlo a quien lo necesita, y así todos contentos y seguros. Abuuuuuuuuuurrrrrrrrrrrrrrrr.